Hechos 2
Queridos jóvenes y amigos,
El capitulo dos de los Hechos esta llena de
instrucción por nosotros, pero en verdad ha sido un obstáculo a muchos en el
cristianismo, mayormente los que no han aprendido las verdades de que hablamos
en el estudio sobre Hechos 1. Una vez,
estando en la republica Dominicana y escuchando desde afuera de una iglesia penticostal, escuché el sonido que era como muchos pájaros
gritando en las mañanas. No me metí para
adentro para saber como hicieron su culto, pero uno podía saber que era una
escena de pura confusión. Eso no es lo
que vimos en el capitulo dos de los Hechos; y después de todo, lo que vemos en
este capitulo no se repita aun en el libro de los Hechos, mucho menos hoy en día.
Jesús les había dicho a sus discípulos en el capitulo
anterior y también en Lucas 24:49 “Porque Juan ciertamente bautizó con
agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos
días.” Y “pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis
investidos de poder desde lo alto.” Este
capitulo dos es el cumplimiento de esta promesa para los judíos, igual como era
en el capitulo diez por los gentiles.
Dios estaba formando algo nuevo que no hubo antes; un solo cuerpo de
creyentes, todos llenos del Espíritu Santo en una forma singular. Nos ayuda notar las palabras del Señor Jesús
en Juan 14: 17 “el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir,
porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con
vosotros, y estará en vosotros.” El
Espíritu había estado con ellos antes, pero ahora en ellos, para no partir para
siempre jamás. Este es uno de las gran diferencias entre el cristianismo y judaísmo.
¿Entonces, que tiene que ver con nosotros hoy en día
el bautismo del Espíritu? ¿Somos
nosotros bautizados con el Espíritu individualmente como enseñan algunos? ¿Debemos hablar en lenguas, hacer milagros, y
todo esto, mostrando que somos “bautizados con el Espíritu? La respuesta es ¡NO! Porque es algo ya hecho de Dios, formando un
solo cuerpo de judíos y gentiles, y nosotros como individuos somos añadido a
algo que Dios ya hizo hace tantos años; somos sellados por el Espíritu (Efesios
1:13); tenemos la unción del Espíritu (1 Juan 2:27); el Espíritu de Dios mora
en nuestro cuerpo (1 Cor. 6:19). Todo esto es algo nuevo que pertenece a un
cristiano que no pertenecía a uno como el rey David o a un hombre de fe como
Abraham, porque ellos, aunque eran creyentes, renacidos, no eran cristianos. Pero individualmente el bautismo del Espíritu
Santo es algo que ya pasó y no es algo que nosotros hoy en día buscamos o
esperamos.
Hay mucho mas que queremos notar en este capitulo
que nos da buenas instrucciones para el día de hoy. Si el Señor no viene antes, estaremos
considerando estas cosas pronto.
Gracias a ustedes que han hecho preguntas acerca de
mi hijo. Él sigue allá en Kuwait sin
ninguna fecha de regresar. El Señor le
esta guardando de peligro y tiene algo de comunión con por lo menos un creyente
entre sus compañeros de trabajo.
Agradecemos sus oraciones por él, tanto en el espiritual como en lo
natural, pues no es bueno que uno sea separado de la mesa del Señor y de
comunión con los santos por tanto tiempo.
Su hermano solo por gracia, Felipe Fournier