David, visto en ojos de Jonathan y Saúl
Léase 1 Samuel 19
Queridos jóvenes y amigos,
Hemos notado el amor que tuvo Jonathan para David y también, el veneno de
la envidia que se presenta en Saúl. En
nuestro capitulo notamos algo mas, pues Saúl llegó al punto de hablar con su
propio hijo Jonathan con fines de alcanzar la muerte de David. Jonathan se puso triste por causa de esto, e
intentaba cambiar la mente de su papa con palabra persuasivas. “No peque el rey contra su siervo David, pues
que ninguna cosa ha cometido contra ti: antes sus obras te han sido muy buenas;
Porque él puso su alma en su palma, é hirió al Filisteo, y Jehová hizo una gran
salud á todo Israel. Tú lo viste, y te holgaste: ¿por qué pues pecarás contra
la sangre inocente, matando á David sin causa?”
Parece que Saúl escuchó las palabras de su hijo, porque dijo “Vive
Jehová, que no morirá.”
No juzgo las intenciones buenas de Jonathan, pues de verdad amaba a David,
pero tenemos un ejemplo que el mundo inconverso no se salva por medio de palabras
muy persuasivos. La eficacia del
evangelio queda en el poder del Espíritu Santo, aplicando la palabra de Dios al
corazón de cada cual. Quizás pensamos
que tiene que haber predicadores más elocuentes, y quizás lamentamos cuando oímos
el evangelio predicado con mucha debilidad.
Pero tenemos que recordar que no es por elocuencia ni palabras bien
dichas que el alma llega a sentir su condición perdida y su necesidad de un
salvador. Jonathan habló con elocuencia
a su papa, y todo lo que dijo era verdad.
Pero el corazón de Saúl era decido en contra David, y duró muy poco
tiempo sus promesas de abandonar sus atentados contra la vida de David.
Tengo dos cosas mas que quiero mencionar sobre este capitulo. Notamos las palabras de Michal,
la hija de Saúl, esposa de David “Si no salvares tu vida esta noche, mañana
serás muerto.” Para mi forma una
advertencia a los que todavía están en sus pecados que no hay tiempo de
esperar. Hubo prisa para David, que tuvo
que huir de la ira de Saúl. En cierto
sentido, así es con el pecador en sus pecados.
Como dice en 2 Corintios 6:2 “He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí
ahora el día de salud.” Y usted, querido
lector, ¿ha huido usted a los brazos extendidos del Señor Jesús? Usted también tiene un fuerte enemigo, pero
como David derrumbó a Goliat, así el Señor Jesús ha anulado el poder de nuestro
enemigo, Satanás. Ojala que cada uno de
mis lectores abra hallado el lugar de seguridad.
Una cosa más; notamos aquí que Michal echó
mentiras defendiendo a David de su padre.
A veces se haga la pregunta ¿se puede decir mentira cuando esta uno
protegiendo a otro? En vez de contestar
la pregunta directamente, les digo esta historia. Durante la segunda guerra mundial, los Nazi
de Alemania habían triunfado sobre la mayoría de las naciones de Europa y
ocupaban sus ciudades. Hay una historia
que sin duda algunos de ustedes han leído de la
familia de Holandeses que protegieron a los judíos. Había una de las hijas en esta familia,
Nelly, que era celosa en cuanto a la verdad. Un día, vino un soldado Alemán a la casa y vio
una señorita ayudando en la casa, con cabello rubio y ojos azules. No parecía ser judía, pero era. El soldado le
dijo a Nelly “es ella Judía? Nelly contestó que si, y la señorita fue
presa. Los otros en la familia regañaron
a Nelly por haberle dicho, pero ella contestó “no creo que la señorita va a
sufrir porque yo dije la verdad.” Y así
era. No me acuerdo muy bien como fue,
pero la señorita Judía escapó de los Nazi y no tuvo
que morir, como tantos otros. Yo pienso
que Jehová hubiera podido salvar a David sin las mentiras de Michal.
Disculpas, otra vez, por la tardanza de enviar este estudio. Estoy muy sobre cargado, y aunque es de mi
propio elección, les pido las oraciones, que yo tenga tiempo para las cosas que
son de importancia.
Su hermano solo por gracia, Felipe Fournier