David profetizando y cantando alabanzas
Léase por favor 2 Samuel 22 (o Salmo 18)
Queridos jóvenes y amigos,
Hay algunas cosas que podemos aprender de este capitulo, lindo en su
sentimiento y igual que Salmo 18. Debe
de ser algo importante, pues Dios vio bien darnos lo mismo dos veces en la
escritura. Primero quiero notar algo
bastante básico pero importante. ¿Se
nota que el verso uno de nuestro capitulo corresponde al titulo de Salmo
18? Es posible que ninguno de ustedes hayan tenido la pregunta, pero lo noto aquí porque hay otros
títulos en algunas Biblias que no son inspirados de
Dios, pero los títulos en los Salmos si forman parte de la palabra de
Dios. Refiero a los títulos usados por
varios con la intención de ayudarnos encontrar sujetos en la Biblia. Por ejemplo, estoy mirando aquí una Biblia y
dice sobre capitulo 10 de Juan “Jesús, el buen pastor” y “Cristo, uno con el
Padre.” No tengo queja sobre esto, pues
si es una ayuda encontrar a veces lo que estamos buscando. Solo lo menciono porque no son palabras que
fueron dictados por Dios, sino añadidos por hombres, y por eso hay que tener
cuidado de no darles la importancia como si fueron dichos por Dios mismo.
Hay
muchos creyentes que leen los Salmos porque son de ánimo a sus corazones. Refiero por ejemplo a los versículos 29 y 30
de nuestro capitulo “Porque tú eres mi lámpara, oh
Jehová: Jehová da luz á mis tinieblas. Porque en ti romperé ejércitos, Y con mi
Dios saltaré las murallas.” Podemos
aplicar estas palabras a nosotros, como sin duda sintió David en sus cánticos a
Jehová. Pensamos de las dificultades de
la vida y nos anima pensando del fuerte Dios que nosotros conocemos como
nuestro Padre, y cuida de nosotros. Pero
siempre es importante tener en cuenta que los Salmos fueron escritos como profecía,
que mayormente no hablan ni de David ni tampoco de nosotros, Cristianos
en el día de gracia. Un ejemplo seria
verso 21 de este capitulo. “Remuneróme Jehová conforme á mi justicia: Y conforme á la
limpieza de mis manos, me dió la paga.” ¿Podría decir David que sus manos eran
limpias siempre? Creo que no, pues había
deshonrado a Dios tomando la mujer de otro hombre. Este versículo, creo yo, fue escrito
proféticamente del remanente de Israel en un día aun venidero, que va a
guardarse de la idolatría, cuando la mayoría de la nación estará participando
en una idolatría peor que nunca, dando homenaje a la imagen de la bestia.
Otro
ejemplo no difícil de entender esta en el Salmo 22, un Salmo que leemos a
menudo durante la reunión de adoración, cuando recordamos al Señor en su
muerte. Verso 16 nos dice “Horadaron mis
manos y mis pies.” Claro que esto nunca
fue cierto de David. Es obvio que es una
profecía, tremenda en su carácter, que el Señor Jesús iba a ser
crucificado. Es bien interesante saber
que la crucifixión era un castigo inventado por los Romanos
en su crueldad muchos años después que Salmo 22 fue escrito por David, otra
prueba que la Biblia es la palabra de Dios mismo.
Así
que, amigos, no hay nada de malo en leer los Salmos para participar en sus
sentimientos de sufrimiento y dolor, y del poder de Dios de librar. Pero nosotros no esperamos que nuestros
enemigos sean recompensados, como David en este verso 38 “Perseguiré á mis
enemigos, y quebrantarélos; Y no me volveré hasta que
los acabe.” Mas bien, dijo Jesús
“Oísteis que fué dicho: Amarás á tu prójimo, y
aborrecerás á tu enemigo. Mas yo os digo: Amad á vuestros enemigos, bendecid á
los que os maldicen, haced bien á los que os aborrecen, y orad por los que os
ultrajan y os persiguen.” Mateo 5:
43-44. Hay que estar seguros que estamos
en la época de la gracia, y es la gracia que nos lleva a la misma presencia del
Señor Jesús, conociendo Dios como nuestro Padre, un lugar muy bendito y más
elevado que David pudo haber conocido.
Su hermano
solo por la gracia, Felipe Fournier