Daniel interpretando el sueño
Léase por favor Daniel 2
Queridos jóvenes y amigos,
Volvemos a considerar a nuestro tema, el joven Daniel. En nuestro capítulo vemos que el cautivo de
Israel llega siendo el salvador de todos los magos de Babilonia, quizás un
pequeño prototipo del Señor Jesús, depreciado judío, pero Salvador del
mundo.
Los sueños eran de mucha importancia a la gente de antigüedad. Es posible que el Señor usara los sueños en
el día de hoy, pero para el creyente, es la palabra de Dios que debe de ser
nuestra guía. Es en la Biblia que
escuchamos la voz de nuestro Padre Dios, no por medio de los sueños. Pero en el día de Daniel, entre los paganos y
también entre los judíos, los sueños eran de mucha importancia y a menudo
usados por Dios de hablar a la gente, como por ejemplo Dios habló a José,
marido de la madre de Jesús, que fuera a Egipto y después, que regresara a
Galilea de Israel.
El rey Nabucodonosor había soñado un sueño que también se había olvidado. Solo sabia que el sueño le había molestado
bastante y llamó a sus magos que le dijeren, no solo la interpretación, sino
también que era el sueño. Pero ellos no
tenían poder verdadero de Dios, solo eran astutos en su modo de pensar y solían
en tiempos pasados inventar cosas mas o menos razonables cuando se les pidió
interpretación de los sueños. Pero el
rey, rey mas fuerte en todo el mundo, que ni antes ni después ha habido como
el, ya no iba a aguantar su fingimiento.
“Yo conozco ciertamente que vosotros ponéis dilaciones, porque veis que
el negocio se me ha ido…Ciertamente preparáis respuesta mentirosa y perversa
que decir delante de mí, entre tanto que se muda el tiempo: por tanto, decidme
el sueño, para que yo entienda que me podéis mostrar su declaración.” La sentencia de fracasar en este asunto era
la muerte, y Daniel y sus amigos, siendo incluidos entre los magos de Babilonia
ya, hubieran muerto con los demás.
“Y Daniel entró, y pidió al rey que le diese tiempo, y que él mostraría al
rey la declaración.” ¿No vemos aquí la
fe de Daniel? No era cosa ligera
prometer al rey algo que al momento no podía hacer. Pero el confiaba que Dios lo había enviado a
Babilonia para hacer algo bueno, y ya había probado que Dios era fiel, como
hemos visto en capítulo 1. “Fuése luego Daniel á su casa, y declaró el negocio á Ananías, Misael, y Azarías, sus compañeros,
para demandar misericordias del Dios del cielo sobre este misterio, y
que Daniel y sus compañeros no pereciesen con los otros sabios de Babilonia.”
¿No es bueno que nosotros también tengamos amigos quienes pueden orar con
nosotros sobre las dificultades de la vida?
Pero si nuestros compañeros son puros inconversos, cierto que tal cosa
no puede suceder, ni tampoco si nos hemos aislado de otros, nuestros hermanos
en Cristo. Pero que lindo vistazo
tenemos aquí de los cuatro amigos orando juntos al “Dios del cielo” para que
les mostrara misericordia. Como notamos
recién, el titulo de Dios en este libro es singular, porque principalmente esta
tratando ahora con los gentiles, los judíos habiendo perdido su lugar de
preeminencia en los caminos de Dios.
Es de mucha bendición leer la oración de Daniel, como alaba a Dios por
revelarle el sueño y su interpretación.
Dejo que ustedes abran su Biblia para leerlo y meditarlo bien. Basta decir que en Daniel había una humildad
para las cosas de Dios que nunca se glorificó a si mismo acerca de la habilidad
que Dios le había dado. Dice al rey “Mas
hay un Dios en los cielos, el cual revela los misterios, y él ha hecho saber al
rey Nabucodonosor lo que ha de acontecer á cabo de días” así dando de entender
que no era de Daniel.
Quizás la semana que viene podemos meditar sobre el significado del sueño.
Solo quiero añadir esto de la oración de Daniel “El revela lo profundo y lo
escondido: conoce lo que está en tinieblas, y la luz mora con él.” Hay muchísimas cosas que nosotros no
entendemos en el día de hoy. Pero a Dios
nada es oculto, como Daniel nos dice.
Ojala que podamos confiar en Dios por las cosas que no nos son revelados
en el día de hoy, esperando hasta el día, quizás en el cielo, cuando él nos va
a revelar todo.
Su hermano solo por gracia, Felipe Fournier